EL CAMINO DE LEVANTE PARA CICLISTAS MADUROS


Cuando llega el mes de enero, se me despierta el instinto viajero y me planteo, como cada año, realizar  un nuevo Camino de Santiago. Este año 2011, me parece interesante  realizar el Camino de Levante. Como siempre, lo inicié a finales de junio.  Me pondo mano a la abra y comienzo a buscar información en la red, trayecto, señalización, distribución de las etapas, visitas interesantes, etc . No encontré  mucha información sobre este Camino y tengo constancia de que lo han hecho muchos ciclistas, pero estos, no dejan en la red constancia de su experiencia. Contacto con la Ass. Amigos del Camino de Valencia tf.963859982(info@vieiragrino.com) y les compro la guía del Camino de Levante – GR 239, que tienen editada, es buena y suficiente para hacer el Camino con seguridad. Primera ojeada a la guía y, lluvia de dudas, de inquietudes. Encuentro más información en internet sobre el Camino, y se me solucionan  algunos problemas como,  densidad de albergues públicos, hospedajes privados, que vía coger hasta Santiago, etc. Cuando llegas a Graja de Moreruela, puedes seguir hasta Astorga o dirigirte Ourense,la diferencia de km no es determinante, para mí, prima mas las características de la ruta. Por otro lado, como no tengo los 16 o 17 días necesarios para realizar el trayecto con una cierta tranquilidad,decido acortarlo. Salgo desde Almansa (Albacete) en lugar de Valencia. Las 14 etapas me obligan a hacer una media de 80 km diarios de media. Al final hice 1.100 km sin cometer  muchos errores. Una vez realizado, vivido y disfrutado el Camino, opino que:
a.- Existe muy poca infraestructura pública. Yo busqué pensiones y hoteles de pocas estrellas pero que estaban bastante bien, era cómodos y limpios. Desde Zamora hasta Santiago los albergues públicos son frecuentes, los servicios que ofrece cada uno de ellos, varían mucho.
b.- Hay algunos albergues públicos como el de La Higueruela (un desastre, sucio, descuidado), La Roda (bien, Pl. de Toros) y Ávila de los Caballeros (nuevo y muy bien cuidado). El resto de pernoctaciones los realicé en pensiones y hotelitos.
c.- La señalización, es buena en Albacete, Cuenca y parte de Toledo. Después degenera bastante y  invita al despiste. En Zamora, este Camino confluye con la Vía de la Plata, la cosa cambia a mejor en todos los aspectos, más albergues públicos, mejor señalización, mas afluencia de pelegrinos, etc.
d.- Es un Camino solitario, coincidí con algunos pelegrinos que hacían algunas etapas a pie. De ciclistas muy pocos hasta Zamora. Como siempre, lo mejor del Camino, sique siendo las personas, los pueblos y algunas ciudades.
e.- Como norma seguía el Camino pedreste, pero en más de una ocasión elegí  carretera para hacer la misma etapa, ya que me parecía mucho más cómoda y segura para mis condiciones físicas y mentales. 
f.- Los días más pesados;   San Martín de Valdeiglesias – Ávila , el Padornelo y la Canda y desde Lasa a Vilar de Barrio.
Destacar sobretodo el paisaje que vas visitando. Visitar con más calma, Toledo y Ávila y disfrutar de pueblos como La Roda, El Toboso, Mora,S. Martín de V., Medina del Campo………
La reseña que os propongo no intenta definir nada. Cada caminante ha de hacer su propio Camino. Más que nada, intento estimular a tantos ciclistas mayores de 55 años a que prueben la experiencia. Una bicicleta y mucha ilusión son los instrumentos imprescindibles que se requiere para vivir la bici de otra manera.  La soledad de la vía pecuaria, los caminos forestales, las veredas, las carreteras comarcales,…Las personas,  que como tú, encuentras en tu trayecto te permiten  enriquecer  la experiencia y  equilibrar el alma.  

pg

este gráfico corresponde al trajecto entre ALMANSA Y TABARA